SOS Galgos
Hay historias que enternecen el corazón y sacan el lado más humano que tenemos las personas. Pero a su vez, estas historias vienen dadas por un comportamiento inhumano de terceras personas, las cuales no tienen ni el mínimo criterio ni la más mínima dignidad a la hora de tratar a esa mascota, ese gran amigo y compañero como merece.
En este caso vamos a hablar de una sociedad de ayuda a los galgos españoles conocida como SOS Galgos, detrás de la cual se encuentran miles de historias cuyos máximos representantes son estos peludos compañeros.
SOS Galgos fue fundada en el año 2000 en Barcelona con el objetivo de salvar a los 700 galgos de carreras que eran abandonados o masacrados por el hecho de que ya no interesaban económicamente, puesto que en este mismo año se cerró el último canódromo en el país.
Cada año en España, más de 60.000 galgos son maltratados y asesinados como si tan sólo se tratasen de un trasto viejo e inútil. Las formas de proceder por estos desalmados son muy diversas, desde abandonarlos hasta ahorcarlos o descuartizarlos en algunas ocasiones.
El problema fundamental que existe en este momento es que España junto a Irlanda y Portugal son los únicos países de la Comunidad Europea en los que todavía se permite la caza de la liebre con galgo. En el momento en que el galgo ya no puede conseguir unos buenos resultados, se deshacen de ellos como si se tratasen de un trapo viejo.
Esta situación es una realidad que muchos se han empeñado en no ver, pero está ahí y cada año las vidas de estos amigos son humilladas y arrebatadas sin piedad alguna.
Un buen ejemplo es la historia de Lolita que se puede ver en la página de SOS Galgos, una perrita que fue abandonada y la encontraron voluntarios en un avanzado estado de desnutrición y con heridas de extrema gravedad que le impedían mantenerse en pié. Pero además de eso, hay que tener en cuenta el estado psicológico en que se encuentra un animal al haber sufrido una situación de este estilo. Al principio, cuentan los voluntarios que no había mucha esperanza de conseguir que saliese adelante, pero con el esfuerzo de todo el equipo y las personas que colaboraron anónimamente participando directa o indirectamente (a través de donaciones a la sociedad), Lolita ya tiene una segunda oportunidad.
En la actualidad, gracias a todos estos voluntarios y personas de buen corazón, lolita ha sido adoptada por una veterinaria (Lidia) con la que ha encontrado el calor de un nuevo hogar donde nunca más tendrá que volver a pasar por un infierno parecido.
En el siguiente vídeo podemos ver una pequeña parte de la historia de esta nueva amiga: