Iniciamos la excursión en la estación de Sitges, donde se puede llegar en tren. Una vez en el pueblo, se puede aprovechar para recorrer sus calles y contemplar todo lo que nos ofrece este turístico pueblo de la comarca del Garraf. Sus casas de estilo colonial, edificios de época modernista, el Cau Ferrat, su emblemática iglesia o las callejuelas del barrio antiguo siempre son un buen motivo para acercarse a esta pequeña localidad.

Una vez en el paseo marítimo, seguimos andando en dirección sur dejando atrás las playas de Sitges. Cuando el paseo llega a su fin, debemos seguir por el camino que empieza siguiendo el camino de la costa. En este lugar, podemos empezar a ver indicaciones del sendero que deberemos seguir, el GR92 en dirección Vilanova. Pasaremos junto un edificio de apartamentos y cruzaremos la Riera de Ribes, que solo en caso de fuerte lluvia puede ocasionarnos algún problema.

El camino sigue bordeando un campo de golf y se dirige hacia la discoteca Atlántida, desde donde también podríamos empezar la excursión llegando en coche hasta allí, aunque en este caso deberíamos realizar el camino de ida y vuelta.

En este punto cogemos el sendero con marcas roja y blanca que indica el GR 92 y que sigue junto a la discoteca y las vías del tren y que empezará a ganar altura para sortear un primer pequeño cerro, mientras las vías lo hacen por un túnel.

Llegaremos a un cruce de caminos, debiendo seguir el que indica hacia Vilanova 4km por el “corriol costaner”. En este punto tendremos unas vistas estupendas de la Cala del Muerto y de la Punta de l’Home Mort.

Nuestro recorrido se caracteriza por un paisaje que combina las puntas, pequeños cabos que se adentran en el mar, con las pequeñas calas que encontramos entre ellos. Llegados a este punto, solo nos quedará decidir en qué pequeña playa hacer una parada o donde perdernos por los pequeños caminos que se adentran hacia la costa.

Seguimos el sendero en dirección a Vilanova y tras pasar la Punta Llarga llegaremos al inicio de esta localidad. Desde aquí, algunos carteles nos indican la posibilidad de realizar otros paseos, pero nosotros seguiremos las marcas del GR hacia el centro por la calle Pujada Far de Sant Cristòfol. En esta calle podremos ver algunas casas de indianos y ya junto la orilla del mar el bonito faro que alberga salas de exposiciones, un buen lugar con árboles y césped, donde descansar ya casi al final de nuestra etapa.

Una vez repuestas las fuerzas, deberemos seguir por el paseo marítimo hasta la Rambla de la Pau, que deberemos subir hasta que nos encontremos con la estación, donde cogeremos el tren que nos llevará de vuelta a casa.